Campaña por la tilde de BANCO UNIÓN (por Ortografía perdida, Bolivia).

Nuestros compañeros bolivianos han comenzado una batalla contra Goliat dentro de la cruzada ortográfica. Uno de los grandes bancos del país andino se pasa por el forro la acentuación de su propio nombre. No es aymará, ni quechua. Tampoco inglés, por eso no se lee 'iunion'. Para bien o para mal, es castellano y debe tildarse como aguda que es, acababa en vocal, n o s.

Ortografía perdida, blog hermano nuestro, está innovando mucho. Para esta campaña ha establecido un sistema de tabuladores que definirán su actuación con el susodicho banco. Cuantas más firmas recojan, más actuarán. Aquí los detalles. Aquí las firmas y la justificación.

¿Quién es el pesado? (Zacatecas, México)

Isaac Ponce, de Zacatecas, México, nos envía sus aportes. Por lo general, pocos perciben la omisión de tildes en mayúsculas como falta grave. Pero no por eso debemos olvidar la responsabilidad de quien la comete. El esquema de cartelería de las carreteras de México no incluye acentos. Si otros tuviéramos la oportunidad de llegar a todos los cruces y avenidas del país, humildemente, creo que seríamos más responsables que los señores de vialidad.


Este proyecto nació por la indignación suscitada, en gran parte, porque la autoridad no da el ejemplo que se le presupone. Nos lleva a pensar que otras personas podrían hace mejor uso de sus cargos. Por eso, acciones como la de Isaac pueden concienciar y si entre todos les damos voz, mejor que mejor. Además, hilando fino -finísimo-, transito pesado puede ser sinónimo de "me cuesta moverme". ¿Nos llaman gordos? ¡Gracias, Isaac!

El cuento de AP se presentó en la FeNal de León

El diario A.M. recoge los hechos en la edición del martes 17 de mayo. Muchas gracias a José Luis Ramírez, a Alejandro Jiménez y a los demás asistentes por su retroalimentación, en verdad que en toda plática se aprende algo y ayer no fue excepción.

Nuevo blog en Bolivia: Ortografía Perdida

Estamos de estreno. Diego Guzmán Nagel y Lil Fredes Meléndez también llevaban un tiempo echando humo cada vez que se topaban con una tilde ausente o fuera de lugar. Así que, desde el centro de la región andina, decidieron contactar a Acentos perdidos y sumarse a la campaña, pero con una gran idea.


Como nosotros, querían corregir todo tipo de incorrecciones en los carteles de La Paz. Lo que pasa es que nosotros no hallábamos la forma, pensábamos en plantar una letra sobre otra, pero nos parecía demasiado. Ellos han dado con la forma. Como verán, han ideado una forma menos intrusiva
de compartir su conocimiento y que, en mi opinión, tiene la simpatía necesaria y se integra bastante bien como para que los corregidos lo tomen a bien.

Con ustedes, unas fotos de Ortografía perdida y aquí, su interesante y vistoso blog.